La historia de Frank Zappa y el vagabundo psicótico.
por Angie Oak
Si enumeramos la interminable lista de grandes logros y hazañas del maestro Zappa no deberíamos citar tan sólo sus montañas de discos imprescindibles y todos esos miles de conciertos históricos que ofreció, sino también su faceta de mecenas descubridor de talentos. Sin embargo hasta los genios a veces tienen algún tropiezo, y uno de los errores de Zappa fue empeñarse en convertir a un vagabundo, llamado Wildman Fischer, en una estrella del rock. Larry "Wildman" Fischer era un desquiciado que había atacado a su propia madre, entraba y salía de sanatorios continuamente, y a agobiaba a la gente en las calles cantando extraños temas en los que hablaba del odio que sentía por la mujer que le había dado la vida o de su facilidad para moverse más rápido que un conejo. Zappa buscaba por aquel entonces a nuevos artistas para su sello "Bizarre" y tan pronto como conoció a Fischer, tuvo claro que iba a hacer de él una estrella.
Ni que decir tiene que la grabación de su disco "An Evening with Wildman Fischer" de debut fue compleja. El vagabundo se negaba a entrar en un estudio de grabación, y uno de los empleados de Zappa no tuvo más remedio que seguir al harapiento individuo por las calles con una grabadora en mano. Sin embargo, al final consiguieron convencer a Fischer para que grabase una parte del disco en un estudio. Cuando el disco se puso a la venta, el público americano quedó horrorizado al observar la portada, en la que aparecía Fischer junto a una foto de su madre, colocando un cuchillo en su garganta. El álbum no fue lo que se entiende por un éxito masivo, y encima los fans de Zappa le acusaron de explotar a un tipo con problemas mentales. Pero Mr. Zappa no se dio por aludido, hasta que un día invitó a Wildman a su casa, y al comentarle que no entendía por qué no trataba de guardar un poco de dinero en un banco, Fischer se volvió contra él y su familia, y tocó a uno de los hijos de Zappa lanzándole un juguete. Ese fue el fin de la relación entre el gurú rockero y el vagabundo psicópata.
Ni que decir tiene que la grabación de su disco "An Evening with Wildman Fischer" de debut fue compleja. El vagabundo se negaba a entrar en un estudio de grabación, y uno de los empleados de Zappa no tuvo más remedio que seguir al harapiento individuo por las calles con una grabadora en mano. Sin embargo, al final consiguieron convencer a Fischer para que grabase una parte del disco en un estudio. Cuando el disco se puso a la venta, el público americano quedó horrorizado al observar la portada, en la que aparecía Fischer junto a una foto de su madre, colocando un cuchillo en su garganta. El álbum no fue lo que se entiende por un éxito masivo, y encima los fans de Zappa le acusaron de explotar a un tipo con problemas mentales. Pero Mr. Zappa no se dio por aludido, hasta que un día invitó a Wildman a su casa, y al comentarle que no entendía por qué no trataba de guardar un poco de dinero en un banco, Fischer se volvió contra él y su familia, y tocó a uno de los hijos de Zappa lanzándole un juguete. Ese fue el fin de la relación entre el gurú rockero y el vagabundo psicópata.
2 comentarios:
por cosas como estas... cada día amo más a frank zappa
Gran blog che, me ayuda a saber ciertos pormenores de el gran francesco.
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